El 24 de Febrero se cumplió un año del comienzo de la guerra entre Rusia y Ucrania.

El conflicto en sí arrancó, en épocas de la 2° Guerra Mundial, con el colaboracionismo Ucraniano con las fuerzas Nazi, facilitando uno de los mayores holocaustos de Judíos, a cambio de apoyo económico y político a sus reclamos. A partir de ese momento la tensión con Rusia se mantuvo en constante alerta, dado que en el límite entre ambos países se encuentran las autoproclamadas Republicas de Donestk y Lugansk habitadas en su mayoría por habitantes pro Rusos.

En el año 2014 Rusia anexa a su territorio la península de Crimea, alegando su pertenencia y considerándolo un lugar altamente estratégico. Ante el incumplimiento del tratado entre Rusia y la OTAN del 27 de Mayo de 1997 de no militarizar la Frontera entre esta y los países miembros de la OTAN, a los que la ex-Unión Soviética los reconoció Independientes, Rusia militariza la Región del Donbas.
Ante la ayuda militar y económica de EE. UU y la mayoría de los países Europeos a Ucrania, conjuntamente con duras sanciones económicas a Rusia lleva al conflicto que tiene en vilo al mundo.
Adrian Salim